Seguro que más de una vez te has planteado vestir tus ventanas con estores. No es de extrañar, puesto que son una opción económica, práctica y muy vistosa para cubrir los vanos de la vivienda.
Puedes elegir entre diversos tipos de estores en función de la ventana que vayas a tapar, la cantidad de luz que recibe normalmente o la estética que quieras conseguir. En este artículo te los describimos todos para que puedas elegir con criterio en tu próxima compra.
Tipos de estores
Existen hasta 10 modelos distintos en función de su mecanismo y capacidad decorativa.
1. El estor paqueto o pachetto
El también llamado «cortina romana» es el antecedente directo de las cortinas enrollables. Está compuesto por una tela que se recoge de manera irregular al tirar de una cuerda. Al no tener varillas la caída que tiene es muy natural, bonita y sinuosa. Cuando está totalmente desplegado queda muy plano, ocupando menos espacio que otros de similares características.
La tela es su principal ventaja; de aspecto artesanal, remite a lo bohemio y natural, muy conveniente para estancias en las que se busca crear un ambiente cálido y acogedor. No obstante, al ser un material frágil, conviene que su uso sea más decorativo que funcional. Ten en cuenta que normalmente se hace con lino, un tejido que puede llegar a durar hasta 3 veces menos que otros materiales y cuya limpieza es algo más delicada.
Por ello, pese a su belleza no se recomienda utilizarlo en espacios como la cocina, menos aún si tienes en cuenta que el lino no es un material ignífugo.
2. El estor plegable o de varillas
Es perfecto para aquellos propietarios que quieren tener en su vivienda la comodidad de los estores y la apariencia de las cortinas ya que su subida es muy similar, más sutil que la de los estores plegables. Es un clásico que no pasa de moda gracias a la cantidad de tejidos y tonalidades disponibles.
Durante la confección, el textil se trabaja de manera que queden insertas en él unas varillas que, al plegarlo, lo recogen a modo de acordeón. Deja unos pliegues totalmente simétricos y proporcionados con los que aporta un aspecto ordenado y armonioso.
El tejido que se emplea es algo más recio y pesado que el del resto de estores, por lo que se considera competencia directa del tejido screen que veremos más adelante. No obstante, es de reconocer que su mantenimiento, limpieza y durabilidad no es tan favorable.
Aunque es uno de los más tradicionales, poco a poco se han podido ir incorporando en su estructura dispositivos que mecanizan su funcionamiento.
3. Tipos de estores enrollables
Pero sin duda, el estor por excelencia y más solicitado en el mercado es el enrollable. Su practicidad, sencillez y elegancia lo han convertido en la opción prioritaria de los consumidores.
Su mecanismo es muy sencillo, y puede ser accionado de forma manual o motorizada: basta con tirar de la cadena para que la tela quede totalmente enrollada alrededor de un tubo que se sitúa en la parte superior de la puerta o ventana. La tela está fabricada en tejidos técnicos o láminas especiales que no pueden separarse del tubo para lavarse, lo cual no es un problema, ya que para limpiarlos basta con pasarles un paño húmedo.
Dentro de este concepto general de estor enrollable hay subgrupos en función del tejido empleado:
– Tejido screen: El más habitual por sus prestaciones y fácil mantenimiento. Permite que pase la luz natural al interior de la vivienda, pero no las miradas indiscretas. Desde dentro podrás ver lo que ocurre fuera, pero no sucederá igual a la inversa. En función de la trama que escojas para el tejido, este podrá ser más o menos traslúcido, pudiendo llegar incluso a la opacidad total.
Puede realizase en fibra de vidrio y PVC o poliéster y PVC, algo que trae ventajas como: una mayor durabilidad y resistencia a los cambios de temperatura y humedad; no se deshilacha; su estructura es ignífuga; resulta muy sencillo de mantener y limpiar por su capacidad para repeler el polvo, de ahí que se utilice sobre todo en cocinas y zonas de tránsito constante como el baño.
– Tejido traslúcido: Como el propio nombre indica, permite un mayor paso de luz al interior. No obstante, protege de los efectos nocivos de los rayos solares manteniendo tus puertas y ventanas como el primer día. Se recomienda para zonas en las que no se requiera una oscuridad total como los salones.
– Tejido opaco o black out: Es el antagonista del anteriormente comentado. Se trata de un tejido mucho más grueso y totalmente opaco que impide por completo la entrada de luz natural desde el exterior. Es conveniente instalarlo en habitaciones donde sí se requiera oscuridad total, como los dormitorios.
– Estor noche y día: Esta modalidad es una de las que más avances ha experimentado en los últimos tiempos. Antes este concepto era empleado para aludir a un conjunto formado por dos estores, uno más opaco para la noche y otro más traslúcido para el día. En función del tipo de iluminación que se necesitara, se bajaba uno u otro, mientras el que está en desuso queda enrollado en la parte superior.
Hoy, cuando hablamos de estores noche y día nos referimos a aquellos que están fabricados con dos tejidos, uno traslúcido y otro opaco, que se superponen en bandas horizontales. Al moverlas con el cordón o el mando a distancia las franjas se van solapando, permitiendo bloquear por completo la luz o dejarla pasar en mayor o menor medida a través de las traslúcidas. Es una solución perfecta para conseguir una iluminación totalmente adaptada a tu gusto. Además, al estar realizado en poliéster o fibra de vidrio repelen la humedad y el polvo.
4. El estor japonés
Su nombre deriva de las similitudes que guarda con los paneles de las casas japonesas tradicionales. Normalmente se emplea para tapar puertas correderas, mucho más anchas que las normales.
Está compuesto por varios paneles individuales cuya anchura oscila entre los 60 y 80 centímetros. Quedan sujetos por rodamientos superiores y varillas de contrapeso inferiores. Para abrirlo por completo puedes desplazar por los rieles paralelos todos los paneles hacia un lado o la mitad hacia la izquierda y la otra mitad a la derecha.
Tal es la versatilidad de este estor que incluso se emplea para separar ambientes como si de una pared de tela se tratase.
5. El estor de lamas
Hasta ahora has visto que los estores se fabrican en su mayoría con textiles. Pues bien, los estores de lamas pueden realizarse en otros materiales como el plástico,el aluminio,el PVC, la madera o el poliéster, entre otros (pudiendo llegar a combinarse entre sí).
Los listones pueden disponerse vertical u horizontalmente, y cuentan con la ventaja de ser totalmente regulables. Así no tendrás que decidir entre una luminosidad plena o la oscuridad absoluta. Basta con situarlos en el ángulo que gustes para disfrutar de la iluminación que prefieras.
Pueden activarse de manera manual o motorizada. En este caso el mando tiene una doble función: por un lado elevar o bajar el estor y por otro cambiar la orientación de las lamas para que permitan un mayor o menor paso de luz natural.
6. Estores para cerramiento de balcones y terrazas
¿Has reformado recientemente tu vivienda y has conseguido unos centímetros extra cerrando balcones y terrazas? Puede que ahora te preguntes cómo modular esta nueva entrada de luz.
De nuevo, los estores son la solución ideal. Sea cual sea la amplitud del espacio, puedes beneficiarte de las prestaciones ya comentadas en los apartados anteriores. Si tienes unos techos muy altos te recomendamos un estor japonés, y si son estándar, apuesta por los enrollables de tejido screen. Filtran los rayos UV, son muy fáciles de limpiar y con un mando a distancia podrás subirlos y bajarlos sin ningún esfuerzo.
Los estores han desbancado a las cortinas como protagonistas de los cerramientos. No es de extrañar, puesto que el resultado que aportan es mucho más espectacular (por no hablar de que resultan más económicos).
7. Estores para salón
Por lo general, los estores utilizados en el salón suelen ser los más amplios de la vivienda y los que dan una imagen más clara de la personalidad del propietario. Por ello, hay que descartar aquellos modelos que no resulten especialmente cómodos.
Es el caso de los estores que se recogen con cordón. Es preferible que sean de cadena, puesto que es mucho más estética y no quedará tirada en el suelo de cualquier manera como sí puede ocurrir con los primeros.
En lo que respecta al apartado decorativo, procura elegir tonos claros, preferentemente lisos y un tejido más tendente a lo traslúcido que a lo opaco. Los salones agradecen más la luminosidad y la amplitud visual que la luz aporta.
8. Estores para dormitorio
Los dormitorios son estancias en las que se busca tranquilidad, recogimiento y descanso, con independencia de si se trata de habitaciones de matrimonio o infantiles. Por ello, se recomienda utilizar tonos suaves, nada de colores vibrantes o estampados excesivamente llamativos.
Desde el punto de vista práctico, lo que se busca es un paso de luz natural tamizado, lo suficiente para ir iluminando poco a poco la habitación sin que los rayos del sol lleguen a molestar. Igualmente, es conveniente que la luz de las farolas durante la noche no te impida coger el sueño. Teniendo en cuenta esta dualidad, los estores noche y día antes tratados pueden resultarte de mucha utilidad.
Otro tejido muy utilizado para los dormitorios (especialmente juveniles e infantiles) es el screen, ya que permite una mayor personalización, ya sea a través de estampados o de impresión digital. Esta opción le resultará muy llamativa a tus hijos, quienes podrán ver cada día sus gustos e intereses reflejados en el estor: imágenes reales de su grupo de música favorito, personajes animados, dibujos, animales… Verán su habitación como un refugio a su medida.
9. Estores para cocina
La cocina es el lugar de trabajo de la vivienda. Lo más normal es que haya salpicaduras, manchas y mucho ajetreo en el día a día. Por ello debes decantarte por opciones prácticas que no descuiden el apartado estético.
Aunque lo tradicional ha sido incorporar cortinas a este espacio de la casa, lo cierto es que resultan poco funcionales: están hechas con tejidos sin tratamiento que cogen polvo con mucha facilidad, por no hablar de que, si se manchan, tienes que estar montándolas y desmontándolas constantemente.
Hemos visto como los tejidos screen resultan muy convenientes por su facilidad para ser limpiados gracias a su composición de fibra de vidrio y PVC. Además combinan a la perfección con todo tipo de estilos: desde el minimalista al rústico, pasando por el industrial y el moderno.
Si quieres darles un toque divertido puedes encargarlos con alguna frase o texto aludiendo a algún aspecto culinario, una imagen de deliciosa repostería o una receta que tuvieras guardada de tu abuela. Podemos elegir la letra que mejor se ajuste a tu idea para que tengas un resultado tal y como lo imaginas.
10. Estores para cuartos de baño
Algo similar ocurre con los estores para cuartos de baño. Seguro que quieres que sean duraderos y resistentes ante cambios bruscos de temperatura y humedad. Además, deben proporcionar ese extra de privacidad tan necesario para un aseo con vistas al exterior.
Por ello, volvemos a recomendar la instalación de estores enrollables con tejido screen o los noche y día por todas las prestaciones ya señaladas: repelen la humedad y el polvo, resisten las altas temperaturas, se limpian pasando un trapo húmedo, no requieren mantenimiento, puedes encontrarlos en todas las tonalidades que imagines, no pasan de moda, etc.
¿Conocías todas estas variedades? Como habrás podido comprobar, el mundo de los estores puede ser algo confuso si no lo conoces por la cantidad de opciones disponibles. Pero con esta guía básica verás como te resulta mucho más sencillo escoger aquel que mejor se adapte a tus necesidades y a las de tu vivienda.
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