El dormitorio es una de las estancias más importantes de una casa, pero no siempre tiene toda la luz natural que deseamos. Normalmente, suele ubicarse en habitaciones interiores alejadas de los ruidos. Pero a consecuencia de ello, quizá mira a un patio interior al que no llega demasiada iluminación de la calle. Esto le da a la estancia un aspecto triste y apagado, a la vez que hace que el gasto en electricidad aumente, pues necesitamos recurrir más a menudo a la iluminación artificial para alumbrar la habitación.
Si este es tu caso, en este post te recomendamos una serie de estrategias de decoración para que la estancia gane luz natural y se vea mucho más alegre y luminosa.
Trucos para ganar luz natural en la habitación
Los dormitorios que tienen una buena luz natural son más frescos y confortables, pero también más alegres y bonitos. Para que esto sea así, puedes aplicar estos siete sencillos trucos en relación a la decoración, la pintura o el mobiliario.
1. Colores claros para las paredes
Los colores claros potencian la iluminación natural de una habitación. De hecho, cuanto más claros sean, más luz reflejarán. Además, si te decides por el blanco, la estancia se verá más luminosa. Con los tonos mates, la claridad se refleja en todas las direcciones. Por su parte, los colores vivos proporcionan alegría a la habitación.
Te aconsejamos que al menos el techo sea blanco o de tono claro. Así, la luz rebotará en él y se extenderá por toda la habitación.
Lo mismo podemos decirte del suelo. Cuanto más claro sea el material que lo cubre, más luminosidad tendrá la estancia.
2. Puertas de cristal
Las puertas opacas cortan el paso de la luz. Por ello, si tienes una habitación oscura, una buena idea es que instales puertas de cristal. De ese modo, se filtrará la luz natural procedente de otras estancias cercanas.
3. Las ventanas
Quizá las ventanas de tu cuarto miren, como te decíamos, a un patio interior. Sin embargo, también en este caso te proporcionan luz natural, aunque menos que si mirasen a la calle. Por eso, debes potenciar esa luz que te ofrecen y para ello puedes aplicar estas sencillas ideas.
En primer lugar, no coloque muebles u otros objetos delante de ellas, porque absorberán la iluminación. Igualmente, es muy importante que las mantengas siempre muy limpias, ya que el polvo y la suciedad actúan como una cortina que limita el paso de la luz.
4. Cortinas o estores
Cuando se trata de un dormitorio poco luminoso, las cortinas no son la mejor opción. Evidentemente, si son oscuras no dejarán pasar la luz y en caso de que sean blancas, la limitarán. Ello se debe a que, generalmente, están hechas con telas más densas que las de otros tipos de soluciones.
En este sentido, te recomendamos que optes por los estores y que estos seas de telas translúcidas y en colores neutros. El crudo y el beige son excelentes opciones, pero también el amarillo, el azul claro e incluso el gris. Además, si son enrollables, al retirarlos de la ventana dejarán más espacio para la entrada de luz.
5. Los muebles
El mobiliario también influye en la distribución de la luz natural por el dormitorio. Para empezar, nunca coloques estanterías en posición paralela a la ventana. Además, ten en cuenta que los muebles altos no dejan pasar la luz. Por tanto, procura usarlos bajos y de tonos claros. También es una buena opción usar mobiliario que tenga elementos metálicos, ya que estos potencian la iluminación. Igualmente, debes fijarte en los accesorios y complementos. Por ejemplo, puedes ponerlos de cobre o de color dorado.
Por otra parte, te recomendamos que no abuses de los cuadros. Si hay muchos en la alcoba, no solo parecerá más pequeña, sino que además absorberán la luz que entre por la ventana. Por tanto, coloca solo los estrictamente necesarios.
6. El truco de los espejos
Quizá ya conozcas en qué consiste el truco de los espejos. Es muy sencillo. Si colocas uno cerca de la ventana y de manera que la luz natural se refleje en él, duplicará la cantidad de iluminación en la estancia. Como valor añadido, los espejos también aportan sensación de mayor amplitud e igualmente son un magnífico elemento decorativo, pues los hay de múltiples formas y diseños.
7. La ropa de cama
Con la ropa de cama sucede algo parecido a lo que te indicábamos para el mobiliario. Cuando es oscura, atrapa la luz solar que entra en la habitación. Por ello, busca edredones y sábanas blancas o de tonos claros y neutros.
En conclusión, el hecho de que tu dormitorio sea interior no significa que tenga que ser oscuro. Aplicando estas ideas respecto a pintura, ventanas, mobiliario o decoración, ganarás luz natural y la alcoba se verá alegre y lucirá mucho más.